Mitos y verdades sobre el tabaquismo

¿Qué es verdad y qué no respecto al consumo de tabaco?.

Es un hecho que fumar es nocivo para la salud y que con el tiempo esta actividad trae graves consecuencias para nosotros y nuestro cuerpo. Tratemos algunos mitos y verdades que se han tejido alrededor del cigarrillo:

• Muchos dicen que cuando fuman se relajan y su estrés desaparece pero esto no se debe al cigarrillo sino a la ausencia de síntomas de abstinencia. El tabaco no tiene ninguna propiedad relajante y en realidad es un estimulante.
• Cuando se deja de fumar se sufre más por la abstinencia ​que por el daño que le hace el tabaco ​al cuerpo. Es cierto que al dejar de fumar la ausencia de nicotina genera malestar pero esto es temporal. Los beneficios de dejar el cigarrillo se empiezan a ver de inmediato.
• Los cigarrillos​ bajos en nicotina (light) no hacen daño y no son cancerígenos. En teoría no son igual de perjudiciales pero las personas suelen fumar mayor cantidad de estos para conseguir la misma concentración de nicotina que antes.
• El cigarrillo adelgaza y si lo dejo engordo. Fumar quema calorías pero no se considera como dieta: mejor haz ejercicio o cambia tu alimentación.
• “Ya estoy muy viejo para dejarlo”. Nunca es tarde para dejar de fumar, seas joven o mayor. Tu salud te lo agradecerá desde el primer día.

Ser fumador pasivo también es nocivo

Los fumadores pasivos​ son aquellas personas que sin ser fumadoras están expuestas con frecuencia al aire contaminado por el humo de tabaco. El humo que expulsa el fumador es incluso más nocivo que el humo inhalado por ellos porque contiene mayores concentraciones de sustancias perjudiciales.

En el humo del tabaco hay alrededor de 4.000 productos químicos ​conocidos: 250 son nocivos y más de 50 son cancerígenos para el ser humano. En espacios cerrados este humo es inhalado por todos por lo que tanto fumadores como no fumadores quedan expuestos a sus efectos.

​Consecuencias y riesgos asociados al tabaquismo pasivo:

• El riesgo de padecer cáncer broncopulmonar aumenta en los fumadores pasivos.
• Es causa enfermedades cardiovasculares. Los fumadores pasivos presentan un riesgo mayor de infarto y otras enfermedades del corazón.
• El humo del tabaco puede ser una causa en el desarrollo de enfermedades respiratorias tales como el enfisema y el Epoc (Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica).
• Los niños expuestos al humo del tabaco tienen más posibilidades de padecer enfermedades respiratorias graves a lo largo de su vida como asma, bronquitis y neumonía.
• En el lactante puede existir síndrome de muerte súbita, y en el feto, bajo peso al nacer.
• Irritación nasal, de los ojos y vías respiratorias.

Lo mejor que puedes hacer para evitar el tabaquismo pasivo es defender tu derecho a disfrutar de lugares públicos libres de humo de tabaco. La prevención es la mejor herramienta para que evites sufrir enfermedades graves en el futuro.

Fecha de publicación: diciembre 11 de 2019.
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