Cuida la salud mental de tu mascota durante la cuarentena

En este aislamiento preventivo, no solo tu rutina ha cambiado, sino también la de tu mascota. Ayuda a evitar que se estresen y conoce los beneficios.

En esta cuaren​tena, la cotidianidad de todos ha cambiado y, como consecuencia, la rutina de nuestras mascotas también se ha visto alterada. Ahora pasamos más tiempo con ellas, pero sus momentos de ejercicio están limitados. Esto puede generarle estrés al animal, lo que se refleja en varias conductas anormales a las que debemos prestar atención.

Catalina Mejía, médica veterinaria y magíster en Etología y Bienestar Animal, dice que hay que aprender a identificar los comportamientos de la mascota con los que puede estar tratando de expresar incomodidad o decir algo más. “Los animales de compañía poseen, al igual que nosotros, varias dimensiones: física, mental, emoc​​ional y hasta espiritual. Al formar un vínculo estrecho con las personas, ellos impactan nuestras dimensiones y nosotros las suyas. Es esencial cuidar de nosotros y nuestro bienestar, puesto que ellos perciben lo que proyectamos. En nuestras manos está propiciar actividades que les generen bienestar y disminuyan su estrés​”, afirma Mejía.

Síntomas de que tu mascota está estresada​

En el perro, el estrés se determina por cualquier cambio en su comportamiento habitual.​

• Siempre fue juicioso y empieza a destruir objetos: esto lo hace como una muestra de que no logra gestionar su estrés.
• Hay vocalizaciones excesivas: muchos perros usan los ladridos para soltar el estrés acumulado.
• Pierde hábitos de hig​iene: si nunca se orinaba dentro de la casa y comenzó a hacerlo.
• Hay alteraciones en la alimentación: sea exceso o falta de apetito.
• Nunca descansa: todo el tiempo está en movimiento sin encontrar el lugar que necesita.

Respecto al gato, algunos síntomas pueden ser similares a los de un perro, pero hay diferencias.

• Hay vocalizaciones atípicas: maúlla o hace sonidos distintos en horarios no habituales. Por ejemplo: si antes dormía tranquilo y ahora se levanta en la madrugada a maullar.
• Se muestra esquivo al contacto: en especial, si era cariñoso y permitía el acercamiento.
• Aumenta el acicalamiento: los gatos son muy cuidadosos con el estado de su pelaje. Si esa conducta se altera, hay algo anormal.
• Cambia la alimentación: sea por exceso o falta de apetito. Recuerda que un gato siente estrés si su recipiente está vacío (debido a su naturaleza de cazar presas pequeñas varias veces al día).

Catalina Mejía dice que las intervenciones que podemos hacer para aliviar los niveles de estrés se denominan enriquecimiento ambiental, que c​onsiste en hacer modificaciones en algunas instancias para reducir situaciones estresantes y generar a los animales mayor bienestar. Estas intervenciones varían dependiendo del aspecto a mejorar:

• Ayudarles a desarrollar sus capacidades cognitivas: los animales son seres muy inteligentes y requieren usar esa inteligencia para algo: enfocarse en una actividad. Esto no solo les evita el aburrimiento, sino que les ayuda a crear vínculos más sanos con el humano. Enseñarles trucos u órdenes nuevas potencia esa actividad cognitiva.
• Ejercicio físico: los paseos de tu mascota están limitados actualmente a las idas al baño a causa de que cada persona dispone de corto tiempo para sacarla. “En este momento la parte física se cubre con sacarlos a pasear. La idea es hacer divertido ese paseo para que el animal disfrute. El ejercicio lo podemos unir a sesiones de juego dirigidas por nosotros, lanzándole cosas al perro o simular con el gato un juego de caza”, dice Catalina.